Sintiendo tu mirada arder en mi ser lentamente,
contemplando los siete círculos del infierno,
en cuál de ellos iré a parar ?;
acariciando tu alma, cual cómplice de un delito
en plenitud del silencio,
idealizando a la mujer de mis sueños,
tan perfecto podría llegar a ser este sueño?
o envolverme en las llamas del infierno
tan solo me ha de quedar.
Confesar mi pecado sería lo ideal,
mas esta percepción del corazón,
se resiste a expíado estar.
Matemática del corazón,
negociando mi tensión,
en la espera de crear
la historia de nuestra razón.
Detallando la paráfrasis del verso anterior,
decir quiero, que enamorándome de usted estoy,
que sin importar los círculos del infierno
para adelante voy.
Y ... si han de generar un infierno más por mí?
gran dilema este que se ha de crear,
será esto quizá los avatares de la vida?,
estaré cometiendo un pecado Capital?;
amanesco pensando que todo fue un oasis
en proyección de una noche agitada,
empero llega el día y la hora indicada,
y no es lo que manda mi subconciente,
es la realidad hiriente.
ORCRU
