Recorriendo las vías del pasado,
trayendo a colación
los momentos vividos.
Recuerdo hasta hoy
la promesa hecha
ante el umbral de tu casa,
mi estimada.
Caminando de la mano
con las ilusiones de juventud,
soñando con el mañana,
soñando con el futuro.
Recuerdo aún mi promesa,
mi estimada.
Recuerdo tu carisma,
y dentro de mis vagos recuerdos,
tu sonrisa.
Pues recuerdo aún mi promesa,
mi estimada.
Algarabía expresa,
a los juegos habituales
en nuestro barrio,
broncas, amoríos, ilusiones
que todos vivimos.
Pues recuerdo aún la promesa
que te hice,
estimada mía.
Pasaron los años,
sigo cumpliendo mi promesa,
pasaron los años ...
te cuento,
que visité nuestro querido barrio,
y en realidad,
si que esta envejeciendo.
Hoy cumples un año más
de velar nuestros sueños,
nuestro caminar,
de todos y cada uno de nosotros
que estubimos a tu lado
en aquellos tiempos,
estimada mía,
cumplo y seguiré cumpliendo
la promesa que te hice
ante el umbral de tu casa,
cuando yacías inerte
en aquella caja fuerte
que impedía tu salida,
en aquella caja fuerte
que se convertía
en tu principal refugio.
Estimada mía, hoy y como siempre
recordamos un año más de tu partida
ORCRU